NO A LA EXTRACCIÓN DE CACTUS DE SU HABITAT NATURAL

Para entender por qué está mal sacar cactus de su hábitat, hay algunas cosas que debemos saber
De las cientos de semillas que un cactus adulto y maduro arroja, muy pocas llegan a germinar. Muchas de ellas caerán en lugares desprotegidos, sobre piedras, el calor extremo liquidará el embrión, incluso muchos frutos ni llegarán a abrirse por ataque de predadores naturales, etc.

Algunas tendrán la suerte de caer cerca de la planta madre, o en una zona relativamente cubierta que pueda mantener cierta humedad por el breve tiempo que duran las lluvias de verano. Cuando esas poquísimas plántulas germinen, tendrán durante varios meses el tamaño de una cabeza de alfiler, muy poco volumen para acumular agua, y una epidermis super delicada. Pocas defensas para un ambiente con muchos peligros: pequeños herbívoros sedientos, insectos, o incluso una sequía más fuerte de lo habitual pueden liquidarlas en poco tiempo. Los grandes hervíboros los pueden pisotear o comerse los pastos y arbustos que los protegen del sol directo, y morir insolados.

Pasado un año, la cantidad de hijos sobrevivientes es ínfima, y los que se mantienen en pie aún son muy chiquitos e indefensos, pero ya irán tolerando mejor las sequías y el sol. Los herbívoros que buscan brotes tiernos con pocas espinas aún seguirán siendo un peligro que sortear por un par de años más.

Pueden pasar decenas de años hasta que se conviertan en cactus adultos y empiecen a florecer. Florecer significa estar disponible para ser polinizado y así formar semillas, pero no todos los cactus son autofértiles, muchos necesitan otro ejemplar para esto. Si no hay ejemplares disponibles cerca, será imposible. Por otra parte, florecer significa para un cactus un esfuerzo enorme. En época de floración, si las lluvias acompañan, el cactus invierte toda su energia en formar el capullo y mostrar una flor vistosa que atraiga a los polinizadores. Si no hay polinización, todo ese esfuerzo habrá sido en vano. Pero si la hay, el cactus seguirá invirtiendo toda su energía en formar el fruto y hacer madurar las semillas. Sí, esas semillas de las cuales sobrevivirán y se harán adultos muy, muy pocos ejemplares.

Cuando alguien extrae un cactus de su habitat, muchas veces sin mala intención, el daño que está haciendo es ENORME. Está quitando posibles parejas para polinización, está quitando la posibilidad de que ese cactus arroje semillas y mutila el ciclo de vida, o sea que no solo se saca un ejemplar, sino que además se priva a la naturaleza de toda la descendencia del ejemplar extraído.

Cuando se saca un cactus grande de habitat, se le está robando a la naturaleza algo que posiblemente le haya tomado 20, 30 o más años formar. Se afecta además el delicado equilibrio del ecosistema y al reducir la competencia de plantas nativas se les cede espacio a las exóticas invasoras. Se priva a las abejas, avispas y pequeños pájaros del néctar de las flores, etc.

La naturaleza, para reponer ese ejemplar extraído, necesitará otros 20, 30 o 50 años. Si muchas personas van a tomar cactus de habitat, es muy posible que la naturaleza NO PUEDA REPONER ESOS EJEMPLARES NUNCA MÁS.

A todo esto tenemos que sumarle que la mayor parte de los cactus adultos no tolera el cambio de habitat a maceta, de un clima a otro, la aparición de nuevas plagas y termina muriéndose en vano.

Es muy común este pensamiento en la gente: "si tomo un cactus pequeño no pasa nada" ¿saben que pasa si 50 personas tienen la misma idea? ¿Y si 100 personas pensaran lo mismo? ¿qué pasará el día en que los hijos de nuestros hijos vayan al habitat y solo encuentren piedras?

Otra idea muy común es la siguiente: "Si todos lo hacen da lo mismo que yo también lo haga". Ese el pensamiento más dañino que podemos tener como sociedad. ¿Que pasa si empezamos a sentir que todos roban, que todos matan, que todos contaminan? Gracias a ese pensamiento es que tenemos ciudades llenas de basura, calles llenas de conductores imprudentes y corazones llenos de egoismo por todos lados. EL CAMBIO SIEMPRE, PERO SIEMPRE, EMPIEZA POR UNO MISMO. No importa lo que hagan los demás, es responsabilidad de uno hacer el bien, dar el ejemplo, y cambiar la frase a ésta: "si todos hacen las cosas bien, yo también tengo que hacer las cosas bien"

Muchas veces me han preguntado, con suspicacia: ¿y los cactus de los viveros de de dónde salen? Todos los productores especializados en cactus cultivan sus ejemplares DE SEMILLA. Y generalmente de semillas de
colecciones propias o compradas a otros productores coleccionistas. Todos los cactus que ustedes van a comprar en su macetita Nº 6 son comprados a productores y son ejemplares cultivados.

A veces, y sobre todo en ciudades cercanas al habitat de los cactus, se encuentran puestos que venden cactus sacados de habitat, son fácilmente reconocibles por su gran tamaño y bajo precio. Los que tenemos cactus sabemos lo que valen, y sabemos que un cactus adulto enorme en maceta del 14 no vale 50 pesos. Cuando los ejemplares son grandes y los precios son bajos, es altamente probable que el vendedor sea un depredador de habitat y lucre a costa de algo que es GRATIS Y DE TODOS: nuestra naturaleza.

Una típica actitud de quienes roban cactus de habitat es escudarse en un falso conservacionismo: "Yo saco cactus de habitat porque los estoy protegiendo" Esto es mentira, los cactus nunca necesitaron ayuda humana para subsistir y reproducirse, de hecho lo mejor que se puede hacer por ellos, es mantenerlos alejados de las manos humanas. Muchas veces son los “cuidados” humanos lo que termina matando a los cactus.  Vamos gente, nadie nos necesita, los seres humanos somos lo más dañino que ha surgido en el planeta, incluso para nosotros mismos.

Por todo esto les pido que no extraigan cactus de habitat y que no compren cactus sacados de habitat. Ya hay géneros enteros al borde de la extinción por la codicia humana, incluso especies descubiertas recientemente ya han tenido que ser protegidas de nosotros mismos, es el caso de los Aztekium, Lophophora, Ariocarpus y otras especies originarias del norte de México. Tomemos conciencia antes de que sea demasiado tarde, y la única forma de ver cactus sea en fotos viejas. Pensemos en las futuras generaciones, pensemos en cuidar la hermosa diversidad que nos rodea, y al visitar el habitat, recordemos el enorme esfuerzo de ese pinchudo por crecer y reproducirse, pensemos en lo maravillosa que ha sido la naturaleza al dotarlo del un metabolismo y una resistencia inusual para poder poner verde en lugares dónde solo habría piedras y dejémoslo tranquilo en ese lugar dónde ha vivido decenas de años y seguramente vivirá muchas decenas de años más si lo respetamos.

Si el deseo es de conservar y tener ejemplares en casa, les recomiendo sembrar, sembrar muchas semillas e intercambiar, y en caso de comprar que sea a gente que siembre y no destruya la flora en habitat. Si alguien necesita ayuda para sembrar me puede contactar y con gusto explicaré, no es difícil!

"Si amas a alguien, déjalo libre. Amor no es posesión"

4 comentarios:

{ Unknown } at: 2 de octubre de 2017, 12:40 dijo...

hola, puedo saber de donde sacaste esa información, es decir me gustaría conocer las referencias bibliográficas en las que te basaste para la construcción de tu articulo en este blog.

{ jrc0105 } at: 7 de octubre de 2017, 11:30 dijo...

hola. yo necesito ayuda para germinar las semillas. Compre muchas semillas pero todavía no las puse, aparte tego unas sacadas de los frutos de mis cardones. me podrías ayudar? mi correo es jrc0105@hotmail.com muchas gracias

{ Unknown } at: 30 de octubre de 2017, 23:00 dijo...

Las sembraste ya? Te puedo ayudar si querés

{ La Cactaria } at: 1 de octubre de 2018, 10:50 dijo...

El artículo es de mi total autoría. Soy Técnica en Jardinería egresada de la Universidad de Buenos Aires y me especializo en cactáceas, con 15 años de experiencia en su cultivo.

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